Un dia como cualquiera...

Hoy, me levante a las seis de la mañana, salgo de la cama, me cambio y salgo de la mi celda. Me puse a tomar mates con mis compañeros que están esperando para ir a trabajar...  
Luego entre a mi celda para que el celador pueda hacer el recuento diario, prendo la tele y me puse a mirar lo que ocurría en la república de Chile: tanta gente que perdió todo, y me puse a pensar en mi familia, en que nadie garantiza nada en esta vida, porque la  naturaleza, siempre nos sorprende...
Aquí con el agua y allí con los terremotos,
Después salí al patio, un compañero me comenta que un familiar mío tuvo problemas en otro pabellón; Trato de averiguar como se encuentra, no fue fácil enterarme de lo que había pasado debido al aislamiento, pero me dijeron que esta bien, entonces trato de pedirlo a las autoridades para que viva en el pabellón donde estoy yo.
Hablo con una de las autoridades del penal, el alcalde, a quien encontré en uno de los pasillos del penal. Me dijo que solucionaría el problema que le plantee, Todo esto ocurrió antes de las diez de la mañana.
Llego al taller de creación literario, que es un lugar donde trato de aprender a expresar por escrito sobre algo de esta realidad que me pasa, ya que las horas son largas y no siempre puedo expresarme como quiero. Termine mis horas en el taller y vuelvo de nuevo al pabellón, a mi celda. Tratando de dormir un rato, descansar no es fácil, conciliar el sueño cuando por mi mente pasan infinidades de cosas, pero el sueño llega. Me levantan a las cinco de la tarde para una reunión, y como soy delegado en mi pabellón tuve que asistir, por que son en estas reuniones donde se puede plantear los problemas existentes del pabellón y de cada interno, para luego transmitirle al los internos lo charlado en la reunión. Llego al pabellón y les comento a mis compañeros lo charlado en una reunión que hice a las ocho de la noche...
Después me fui a duchar, en el pabellón algunos caminaban, otros jugaban al truco, mientras otros comentaban lo ocurrido en el día, todos a la espera, que mañana sea un día mejor...     

                                                 Porucnik Walter
                                         Taller: Tras Las Paralelas Azules
                                                 Pabellón Nº5